La temporización del mercado es una de las partes esenciales de la inversión. Hay que saber identificar cuándo hay que entrar y salir de las operaciones. Para ello, hay que entender en qué fase se encuentra un determinado activo y luego operar en la dirección de la tendencia predominante. Puede que no sea fácil desde el principio entender los ciclos. Sin embargo, la práctica hace la perfección, y puedes utilizar los gráficos a largo plazo para ayudarte a averiguar si el mercado está subiendo, bajando, experimentando una acumulación o una distribución.
Sea cual sea el mercado financiero que elijas, acciones, materias primas, divisas o, en nuestro caso, criptomonedas, todos pasan por las mismas etapas y tienen cuatro ciclos principales: acumulación, fase alcista (o avance), distribución y fase bajista (o descenso).
Como los mercados no suelen dar la vuelta en un solo día, a menudo se dispone de tiempo suficiente para detectar cómo un ciclo desemboca en otro. Puede que no seas capaz de elegir los máximos o mínimos del mercado, pero a medida que practiques, identificarás mejor un ciclo específico en curso y tomarás las decisiones pertinentes para comprar, vender o mantener. Así pues, analicemos más detenidamente cada ciclo y sus características específicas.
Fuente: TradingView
Acumulación – el momento en que el dinero inteligente sigue comprando
Cuando comienza el ciclo de acumulación, el mercado empieza a tocar fondo. Aunque comprar cuando los precios están cayendo es peligroso, el dinero inteligente suele operar en miles de millones de dólares y no compra el grueso de su posición de una sola vez. No, acumulan gradualmente su línea de posiciones para no provocar picos en los precios. Así, empiezan a comprar cuando los precios siguen bajando. Sin embargo, su presencia alcista frena la caída.
En este momento, el sentimiento del mercado es extremadamente bajista; los medios de comunicación sólo dan noticias negativas y difunden el miedo a una recesión aún más profunda y a una bajada de los precios, haciendo predicciones escandalosas de que algunos activos pueden bajar a cero. A menudo afirmaban que eso ocurriría con el bitcoin, lo que nunca ocurrió y probablemente nunca ocurrirá.
Muchos inversores minoristas y algunos institucionales ya han vendido todas sus participaciones o incluso se han puesto en corto en el mercado. Sin embargo, por cada vendedor decepcionado, habría un inversor inteligente que ve el lado positivo y compra porque cuando las cosas están más oscuras, los precios están en su mejor momento para la acumulación, y eso es precisamente lo que hacen las grandes ballenas de las criptomonedas; compran.
Fase alcista – comienza el aumento de los precios
El sentimiento del mercado empieza a cambiar de bajista a ligeramente alcista en esta fase. El descenso ha terminado y los precios empiezan a subir haciendo máximos y mínimos más altos, lo que demuestra claramente que la tendencia alcista está en marcha. Esto atrae a una multitud de especuladores, seguidores de la tendencia e inversores minoristas que quieren participar en el movimiento. Así que también empiezan a comprar.
Los medios de comunicación empiezan a dar noticias más positivas sobre los mercados, aunque la economía, en general, siga en recesión. Los novatos en los mercados deben recordar que la economía y el sector del empleo son los últimos en experimentar la recuperación, ya que el dinero fluye primero hacia los mercados financieros y después hacia la economía.
A medida que los precios siguen subiendo, la codicia por ganar más y el miedo a quedarse atrás dominan la fase. Algunos traders compran en las caídas, otros en las rupturas de los máximos anteriores, y así el movimiento al alza comienza a acelerarse.
A medida que la tendencia alcista cobra velocidad, el sentimiento del mercado suele transformarse en histeria. Todo el mundo está comprando, y las caídas son menores, mientras que los picos se estrellan más rápido. Es entonces cuando el dinero inteligente empieza a liquidar sus posiciones. Con cada nuevo pico llega una presión de venta más importante, ya que los primeros inversores aseguran sus beneficios. El avance se ralentiza, y los precios suelen agitarse un poco debido a la presión vendedora de las ballenas del mercado y de los rezagados que creen que aún pueden hacer una fortuna.
Ciclo de distribución – los bajistas del mercado toman el control
Es la etapa en la que el sentimiento cambia de alcista a bajista, ya que los vendedores empiezan a dominar el mercado. Durante algún tiempo, los precios pueden fluctuar en rangos hasta que finalmente se alcanza el máximo. Como los máximos del mercado suelen formarse más rápido que los mínimos, el cambio puede producirse en un mes o incluso en unas pocas semanas.
Los traders pueden esperar la confirmación de un cambio en el mercado que puede venir en forma de algún patrón gráfico técnico, por ejemplo, doble o triple techo, cabeza y hombros, un triángulo descendente, etc. Cuando los patrones se confirman, la caída puede ser rápida y dramática. Es un hecho que los bajistas del mercado pueden destruir en un mes lo que los alcistas han creado en tres. Por lo tanto, las tendencias bajistas se desarrollan mucho más rápido y terminan antes.
Como el declive suele ser rápido, los inversores que no aseguraron sus beneficios antes se encuentran en el punto de equilibrio, o incluso con pérdidas, y piensan que pueden esperar. Para su gran sorpresa y decepción, los precios siguen cayendo y muchos inversores se encuentran bajo el agua, luchando por reducir sus pérdidas. El miedo y la desesperación dominan el mercado y la presión bajista sobre los precios hace que muchos inversores tiren la toalla y salgan, a veces con enormes pérdidas.
Fase bajista – capitulación total y nuevo ciclo de acumulación
Es la etapa en la que los inversores más astutos empiezan a acumular de nuevo sus posiciones largas. Es el periodo que podría llamarse de «toda esperanza perdida» para la mayoría de los inversores que aún se aferran a sus posiciones largas que están en rojo. Incapaces de sufrir pérdidas más profundas, probablemente cerrarán sus posiciones justo antes de que el mercado toque fondo.
Y así, el ciclo completo de cuatro etapas comienza de nuevo. Los que hayan aprendido la lección buscarán señales de que el mercado ha tocado fondo, lo que puede presentarse en forma de patrones gráficos como el doble fondo triple, la cabeza y los hombros invertidos, el triángulo ascendente, etc. Cuando la fase bajista desliza hacia una fase de acumulación, podemos suponer que la tendencia bajista ha terminado y que comienza la fase inicial de una tendencia alcista. Borrón y cuenta nueva.
¿Cuánto duran los ciclos de los mercados financieros?
No hay un tiempo preestablecido para cada fase o cuánto durará el ciclo completo. Depende en gran medida de tu percepción del marco temporal en el que vas a operar. Los traders diurnos pueden ver que el ciclo completo se produce en unos pocos días, mientras que un inversor a largo plazo se centrará en un horizonte de dos o tres años para una tendencia alcista y de un año para una tendencia bajista. Sin embargo, el calendario es preliminar y puede cambiar de un año a otro.
Puntos clave
Los mercados financieros, como cualquier otra cosa en la vida, tienen ciclos. Cualquier acción equivale a una reacción. Del mismo modo, todo lo que sube acabará cayendo y viceversa. Así pues, los mercados siempre tendrán sus tendencias alcistas, que consistirán en fases de acumulación y alcista, y tendencias bajistas, que comprenderán fases de distribución y bajista. Los inversores inteligentes comprarán durante la fase de acumulación y aguantarán hasta que los precios empiecen a estancarse, formando picos. A continuación, cuando observen los primeros signos de la fase de distribución, invertirán y tomarán una posición corta. Mantendrán su posición corta hasta que los bajistas se agoten y sólo entonces asegurarán sus beneficios. Entonces, esperarán a que comience la fase de acumulación. Y así continúa el juego, ¡ojalá hasta el infinito!
